¿Resucitó Jesús, o robaron su cuerpo los discípulos, dejándonos el misterio de la tumba vacía? Ese el enigma que intenta descifrar Agustín Cabeza Segura, inventor de un artilugio para la hipnosis histórica regresiva con la que ya descubrió que Cleopatra se envenenó con estricnina. En las páginas de este libro, dos evangelistas nos dan sus versiones contrapuestas sobre el nacimiento virginal de Jesús; y nos asusta el poder de la santería cubana para curar un enredo de amores. Sentiremos un escalofrío de miedo leyendo los fenómenos extraños en la nueva casa a la que llega un matrimonio con su hija pequeña. La muerte de la esposa permite al personaje cambiar su vida y probarlo todo, en un cuento de absoluto delirio del subconsciente. Dos relatos muestran la cara oscura del poder y del totalitarismo. Un joven inmigrante y un invidente nos plantean un antiguo dilema: ¿es posible ejercer la libertad consumando el propio destino? Seguimos las peripecias en un país lejano de un director de empresa defenestrado, y las angustias del joven que no puede mantener la boca cerrada. Como colofón, la historia del escritor que predijo el hundimiento del Titanic y el ataque a Pearl Harbor.
En estos relatos muy variados y poco “inocentes”, no existe superficialidad: en todos hay un fondo con el que se queda quien los lea, ya sea social o alegórico. Estos relatos muestran el eclecticismo del autor, la diversidad de su temática, la crítica social soterrada en casi todos ellos y su compromiso con el género humano y sus derechos. Nos encontramos ante un escritor que sabe llegar con solvencia a quien lee a través de relatos aderezados con detalles de visibilidad que se convierten en imágenes de inmediato, una narrativa culta a la que puede llegar cualquier lector/a gracias a su claridad expositiva y el lenguaje natural, porque muestra siempre la esencia de lo que quiere transmitir.
Angela Durruthy-Bédat (propietario verificado) –
El libro me ha gustado mucho. Hice una lista en la cual situé mis relatos preferidos, en este orden: Entonces los huevos abundaban, Los locos al exilio, El orador constante, Vedi Nápoles, Barça ou Barsax, ¿Adónde se ha ido? y El extraño caso de un pilongo en Pekín. La lectura del libro es amena gracias a la fluidez de la escritura, el tono justo, irónico, mordaz que emerge en cada relato. Fue un placer leerlo.